Imaginate la escena: una reunión importante. Las risas llenan el ambiente. Y en el centro de todo, el aroma inconfundible que lo impregna todo: un espectacular pernil perfectamente cocido, con ese cuerito crujiente y una carne tiernísima que se desarma sola. Esa imagen es prácticamente la definición de buen momento https://neilh740dfg9.tusblogos.com/profile